Filípica
Una filípica en contexto lingüístico es un encendido discurso condenatorio o diatriba destinada a castigar a un político. Recibió este nombre por generalización a partir del caso concreto de Filipo II, monarca macedonio atacado en varios discursos (las Filípicas) por el famoso orador ateniense Demóstenes.
Los discursos de Demóstenes
El término se origina con Demóstenes, quien profirió cuatro discursos Κατὰ Φιλίππου en contra del monarca Filipo II de Macedonia y sus pretensiones de dominio sobre todas las ciudades estado de la Hélade. Estas Filípicas son entonces, de acuerdo con el contexto histórico, cuatro documentos escritos entre 351-50 a. C. y 340 a. C., dirigidos contra el creciente poder del macedonio, a quien ve como una amenaza, no solo para Atenas, sino para todas las ciudades estado griegas.
Los discursos de Cicerón
Marco Tulio Cicerón, muy admirador de Demóstenes, tituló también en una carta, un poco en broma, Philippicae a sus discursos contra la tiranía de Marco Antonio, denominación que prevalecería con el tiempo. Era una serie de al menos catorce duras invectivas políticas que sus contemporáneos llamaban Antonianae, pues se pronunciaron contra Marco Antonio en la época del segundo triunvirato, cuando este amenazaba con proclamarse rey o tirano de Roma y acabar con el régimen republicano;[1] estos discursos fueron sin duda la causa principal que impulsó el asesinato de Cicerón por parte de los sicarios seguidores del triunviro,[2] y fueron pronunciados o divulgados la mayoría de ellos entre el 2 de septiembre del año 44 y el 21 de abril del 43.
Véase también
Referencias
Enlaces externos
- CICERÓN: Filípicas.
- Textos en latín, en el sitio The Latin Library (La Biblioteca Latina).
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